La Vacunación: Una propuesta económica.

 

La llegada de una externalidad negativa implica impactos de iguales características para la economía y bienestar de las personas, la pandemia de la Covid-19 no fue la excepción. En ella, la economía quedó en segundo plano, al menos en primera instancia.

Todos fuimos testigos de las consecuencias que sufrieron los sistemas de salud de todo el mundo, de lo débil que pueden ser las potencias mundiales ante una pandemia de esta magnitud, a esto le sumamos la detonación de problemas sociales ocasionados por la pobreza, desempleo, y la pérdida de vidas humanas.

La pandemia aún no se ha ido y los efectos que ha ocasionado se están sintiendo, según datos del Banco Mundial, en una estimación modelada por la Organización Internacional del Trabajo, en 2020 a nivel mundial la tasa de desempleo fue de 6.5%, en relación con la población activa total, con un crecimiento del 20% respecto al año anterior. Con respecto al Producto Interno Bruto a nivel mundial, en US$ a precios actuales, en 2020 disminuyó 3% respecto al año anterior.

En Ecuador, según datos del Banco Mundial, en 2020 la tasa de desempleo fue de 6.2%, con un crecimiento del 64% en relación con el año anterior. Con respecto al Producto Interno Bruto, en US$ a precios actuales, en 2020 disminuyó 8% respecto al año anterior.

En mayo del 2021, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) actualizó sus proyecciones de crecimiento económico para 2021, ahora prevé que la economía mundial crecerá 5.8% en este año, implica una significativa mejora frente al 4.2% que proyectaba en diciembre 2020, las principales razones para este resultado fue que la aparición de vacunas eficaces ha mejorado las perspectivas de una recuperación económica duradera con la condición de que estas vacunas puedan desplegarse rápidamente en todo el mundo, y que las políticas públicas tomadas por el estado, con apoyo del sector privado permitan cubrir la demanda, sin embargo, hay incertidumbre en el corto plazo, ante la aparición de nuevas variantes, altos niveles de infecciones que siguen ocurriendo en algunos países y su capacidad de recuperación en sus economías y sectores más afectados.

Entre las economías que analiza la OCDE, principalmente desarrolladas, las que registran proyecciones de crecimiento al alza, son aquellas que han avanzado más rápidamente en sus planes de vacunación: Estados Unidos, Israel y Reino Unido, entre otras. En el caso de Latinoamérica destaca Chile con 63% de la población completamente vacunada (2 dosis o 1 dosis dependiendo de la vacuna) y 8.8% de la población parcialmente vacunada (1 dosis) hasta el 23 de julio de este año, se espera que este país crezca 6.7% este año; por lo tanto, se puede notar una relación positiva entre los planes de vacunación y el crecimiento económico de un país, sin embargo, hay que tener en cuenta muchas más variables propias de cada país para llegar a una conclusión más precisa.

Mientras que las principales economías del mundo tienen proyecciones de crecimiento al alza, según el Banco Central del Ecuador ha proyectado el crecimiento a la baja para la economía ecuatoriana; antes proyectaba que el PIB de Ecuador crecería 3.1% en 2021 y ahora espera un crecimiento de 2.8%.

En el primer trimestre de 2021, la economía ecuatoriana creció 0.7% respecto al trimestre anterior, este comportamiento se explica por el crecimiento de 3.5% del gasto de consumo final de los hogares y el aumento de 2.8% de la formación bruta de capital fijo.

Los resultados interanuales, es decir respecto al mismo trimestre del año anterior, muestran una contracción del PIB del 5.6%, a causa de una variación del consumo del gobierno general en -8.5%, de la formación bruta de capital en -6.3% y consumo final de los hogares en -3%, únicamente las importaciones mostraron un incremento del 2%.

Con respecto al desempleo, en marzo 2021 el Banco Central del Ecuador reportó una tasa nacional de 5.5%, con una disminución del 5% respecto al mes anterior, sin embargo, a partir del mes de abril empezó un incremento significativo, a mayo de 2021 el nivel de desempleo fue de 6.3%, representando un incremento del 13% en relación con el mes anterior.

Estos resultados indican que el desempeño económico en estos meses no fue bueno, impactado principalmente por la lentitud del proceso de vacunación y la incertidumbre electoral, en el primer trimestre, Ecuador estaba entre los países de la región con el menor porcentaje de la población vacunada, alrededor del 10% de la población con la primera dosis y menos del 5% con la segunda dosis.

El lento ritmo de vacunación también afectó al desempeño económico del segundo trimestre, el repunte del virus obligó a tomar medidas restrictivas desde el 23 de abril hasta el 20 de mayo, afectaron a varios sectores que empezaban a tener un pequeño “respiro” en su economía, producto de aquello hubo un deterioro importante en la tasa de empleo adecuado desde abril, donde se ubicó en 32.6% sobre la PEA (Población Económicamente Activa), una disminución del 4% respecto al mes anterior; mientras que en mayo esta tasa se ubicó en 31.5% sobre la PEA, una disminución del 3% respecto al mes anterior.

Bajo este contexto, el nuevo gobierno está implementando un plan de vacunación que ayude a revertir los resultados económicos del primer semestre, al menos en el mediano plazo. Y al parecer está encaminado a aportar al crecimiento económico en los próximos meses, según datos de Our World in Data proporcionados por fuentes oficiales de cada país, hasta el 23 de julio del 2021, Ecuador reportó que el 11.4% de su población ha sido totalmente vacunada (2 dosis o 1 dosis dependiendo de la vacuna) y que el 31% ha sido parcialmente vacunada (1 dosis) con una velocidad que ha tenido un crecimiento exponencial desde junio, por ejemplo: para la semana del 19 de junio se administraban 0.4 dosis diarias promedio por cada 100 habitantes, mientras que para la semana del 19 de julio se administraron 1.9 dosis diarias promedio por cada 100 habitantes, este es el valor histórico más grande desde que empezó el plan de vacunación.

Si bien es cierto, el plan de vacunación no garantiza un crecimiento sostenido para lo que queda de este año, pero ayudará a que la actividad económica registre una recuperación importante principalmente en los últimos meses del año y será la base para que en el 2022 el crecimiento sea más dinámico.

Factores como la confianza en el nuevo gobierno, decisiones sobre política fiscal y políticas públicas en temas sociales prioritarios incidirán en la velocidad y profundidad de la recuperación, pero el primer paso como lo indican los datos y evidencia internacional es regresar a una normalidad relativa que intensifique la reactivación de los sectores estratégicos del país y esto solo se consigue superando la pandemia a través del éxito del plan nacional de vacunación.

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